Cuando un ser querido tiene una enfermedad pulmonar crónica, esto puede traer cambios en la vida de ambos. Como cuidador, usted puede tener que apoyar a su ser querido en nuevas formas. Esto puede ser cierto si usted está cuidando a su cónyuge, su pareja, un familiar, o un amigo. Ayudarse a sí mismo al aprender estrategias para lidiar con las posibles tensiones de su rol.
El hacer frente a sus emociones
Es normal sentir una gama de emociones como a manejar su papel. Usted puede sentirse triste, o incluso temer por la salud futura de su ser querido. A veces, es posible que resentir el efecto de cuidado tiene en su vida. Es importante aceptar estos sentimientos. Ellos son normales. Si usted se siente estresado, busque ayuda a través del acercamiento a los miembros de la familia o amigos. También hable con un proveedor de atención médica. Él o ella puede referirle a un consejero y otros servicios de apoyo.
Cuidar de sí mismo
Tómese el tiempo para controlar su salud y para refrescar la mente y el espíritu. Esto le da la energía para realizar su rutina diaria. Estas son algunas maneras de mantenerse sentirse bien:
Duerma lo suficiente. Apunte durante 8 horas al día. Mantener las siestas cortas para que pueda dormir por la noche. Limite el alcohol y la cafeína. Estos pueden afectar qué tan bien durmió.
Coma bien. Lo que comes afecta cómo te sientes. No se salte las comidas. Coma comidas balanceadas con granos enteros, frutas y verduras y la carne baja en grasa y productos lácteos.
Ejercicio. Trate de hacer algún tipo de actividad física por lo menos 30 minutos al día. Romper su actividad en tres sesiones de 10 minutos puede hacer que sea más fácil.
Haciendo tiempo para usted
Sus necesidades también son importantes. Date permiso para mantener una vida propia. Tome descansos de la prestación de cuidados para relajarse y divertirse. He aquí algunas sugerencias:
Comparta una comida con los demás.
Perseguir un pasatiempo.
Jugar a las cartas o juegos de mesa con amigos y familia.
Crear un espacio en su casa donde usted puede retirarse cuando sea necesario.
Aceptar la ayuda
Es posible que necesite ayuda con el cuidado. Saber que puede contar con los demás puede ser un alivio. Mantenga estos consejos en mente:
Haga una lista de cosas que otras personas pueden ayudar. Pregunte a sus amigos y familia para manejar tareas tales como hacer mandados, dando paseos, o la preparación de comidas.
Hacer uso de la guardería de adultos y servicios de respiro, y programas de salud en el hogar. Estos proporcionan el cuidado temporal de su ser querido, cuando sea necesario. Visite la Internet o la guía telefónica para organizaciones como su asociación local de Enfermeras Visitantes.
Los grupos de apoyo
Únase a un grupo de apoyo para personas con enfermedad pulmonar crónica y sus cuidadores. Esto puede ayudarle a sentir que no está solo. Usted aprenderá las estrategias de afrontamiento y obtener consejos de otros que pasan por las mismas cosas que usted. La religión y las organizaciones religiosas pueden ser una fuente de fortaleza y apoyo para usted también. Llegar a un líder en su comunidad de fe para hablar de sus necesidades espirituales.