Los accidentes cerebrovasculares son la principal causa de discapacidad y la cuarta causa de muerte en Europa. En muchos casos, sin embargo, que no tienen que ser incapacitante o mortal. Conocer las señales de advertencia de un accidente cerebrovascular y actuar rápidamente puede ayudar a usted o su ser querido escapar de los efectos dañinos de un "ataque cerebral". Los tratamientos actualmente disponibles que pueden ayudar a prevenir un accidente cerebrovascular.
Problemas de flujo de sangre
Accidentes cerebrovasculares son causados por problemas con la circulación de la sangre en el cerebro. Circulación de la sangre al cerebro puede ser afectado por cualquiera de una hemorragia, cuando un vaso sanguíneo se rompe (accidente cerebrovascular hemorrágico), o un bloqueo, cuando un coágulo bloquea el flujo de sangre (apoplejía isquémica).
Cuando ocurre uno de estos problemas, una persona puede experimentar uno o más de los síntomas que ocurren de repente. Los síntomas pueden continuar o pueden desaparecer en cuestión de minutos a horas. Las señales de advertencia a tener en cuenta son:
Entumecimiento o debilidad en la cara, los brazos o las piernas, a menudo en un lado del cuerpo
Los episodios de mareos
La pérdida de la visión en un ojo o visión doble
Dificultad para hablar o entender el lenguaje
Grave y súbita cefalea
Es muy importante que llame al 911 inmediatamente si usted experimenta cualquiera de estos síntomas. Se pueden administrar medicamentos en un hospital que pueda revertir el golpe, pero se les debe dar dentro de las tres primeras horas de la aparición de los síntomas. Cada minuto cuenta.
El tratamiento específico
Una vez que los síntomas de alerta son reconocidos, los médicos pueden comenzar el tratamiento apropiado. Los tratamientos para los accidentes cerebrovasculares son muy específicos y dependen del tipo, tamaño y ubicación de la obstrucción o interrupción del flujo sanguíneo en el cerebro. Ellos pueden incluir el uso de potentes fármacos para disolver coágulos cerebrales o reducir y prevenir la hemorragia, o una intervención quirúrgica de emergencia puede ser necesaria para detener el sangrado en el cerebro. La acción rápida y el tratamiento temprano puede hacer una gran diferencia para la salud de una persona.
Aunque cualquier persona puede sufrir un accidente cerebrovascular, ciertos factores pueden colocar a una persona en mayor riesgo. Estos factores incluyen la diabetes, la hipertensión arterial, el tabaquismo, alto colesterol, antecedentes familiares de accidente cerebrovascular, latidos irregulares del corazón (especialmente aleteo auricular o fibrilación auricular), y un estrechamiento de las arterias. Las personas con uno o más factores de riesgo deben recibir una prueba de detección de carrera de su proveedor de atención médica. El examen puede incluir una revisión de la historia clínica, un examen físico, un examen de ultrasonido del cuello para detectar alteraciones en el flujo sanguíneo en las arterias carótidas, y análisis de sangre para el azúcar en sangre y colesterol niveles (perfil lipídico).
La prevención del ictus es también importante. Usted puede ayudar a prevenir un accidente cerebrovascular por hacer ejercicio regularmente, comer una dieta saludable, mantener un peso saludable y no fumar. Mantenga las enfermedades crónicas tales como la diabetes o la presión arterial alta bajo control tomando sus medicamentos y chequeos regulares.