Hacer frente a los cambios después de una quemadura:
Su hijo estará muy contento de estar de nuevo con su / sus juguetes, los amigos, la escuela y la familia. Sin embargo, el tratamiento de quemaduras de su hijo y la recuperación emocional seguirán cuando salga del hospital. Junto con la emoción, usted y su niño también puede sentirse incómodo acerca de lo que sucederá después.
Toda su familia ha experimentado una crisis como resultado de la quemadura, hospitalización, y la interrupción de la vida familiar. Los niños se ven afectados no sólo por cómo una crisis afecta a sus propias vidas, sino también por las reacciones de sus padres frente a la situación. A continuación se presentan algunas estrategias importantes para ayudar a los niños y los padres hacer frente al estrés de la lesión del niño, la hospitalización, tratamiento médico, y ahora volver a casa:
Trate de establecer una rutina diaria que incluya algunas de las actividades cotidianas que realizaba antes de la lesión de su hijo.
Tome un día a la vez. Establezca metas simples cada día; estar orgullosos de los logros diarios de su hijo.
Cuida de ti mismo, como cuidadora de su hijo.
Recuerde, la manera en que su hijo supere esta situación dependerá en gran medida por la forma en que maneja él. Su hijo puede ser más fuerte como resultado de esta experiencia.
Entender el nivel de desarrollo de su hijo. Esté atento a los síntomas. No castigue a su hijo por un comportamiento sintomático.
Espere regresiones, cambios, problemas e ira.
Hable con su hijo con frecuencia. No dé por sentado que si él / ella no lo ha mencionado, no es en su / su mente. Diga la verdad. Dígale a su hijo cómo se siente, pero tenga cuidado de no abrumar a su hijo si usted está teniendo dificultades para hacer frente.
Anime a su hijo a expresar sus opiniones, sugerencias y soluciones.
Asegure a su hijo de la normalidad de sus sentimientos. Exponga a su hijo con otros niños de la misma edad con los mismos problemas.
Fomentar el desarrollo de la competencia y la independencia de su hijo.
Informe a la escuela. Hable con los maestros de su hijo.
Pregunte acerca de los grupos de apoyo.
Deje que otros le ayuden. Busque ayuda profesional si es necesario.
Asegure a su hijo del amor de los padres, apoyo y constancia.