Para recuperarse de la cirugía:
Una vez que la cirugía se ha completado, usted es llevado a la sala de recuperación, que también puede ser llamada la unidad de cuidados post-anestesia. En la sala de recuperación, el personal clínico le monitorizará a medida que se recupera de la anestesia. El tiempo de permanencia en la recuperación depende del tipo de cirugía realizada y el paciente individual. Mientras el paciente se encuentra en recuperación, el personal clínico puede hacer lo siguiente:
Deben controlar los signos vitales como la presión arterial, el pulso y la respiración
Vigile cualquier signo de complicaciones
Tome la temperatura del paciente
Compruebe si tragar o náuseas
Vigilar el nivel de conciencia del paciente
Compruebe las líneas, tubos o drenajes
Revise la herida
Compruebe infusiones intravenosas
Monitorear la distensión de la vejiga del paciente
Mantener la comodidad del paciente con medicamentos para el dolor y la posición del cuerpo
Un paciente puede ayudar a la velocidad de la recuperación al hacer ciertos ejercicios de respiración y movimiento en la sala de recuperación. Siempre consulte con su médico antes de intentar el siguiente:
Las respiraciones profundas. Acostada durante un período prolongado de tiempo puede causar acumulación de líquidos en los pulmones. Hacer respiraciones profundas usando todo el diafragma y el abdomen puede prevenir la neumonía de establecer pulg
Tos. La tos ayuda a eliminar las secreciones del pecho, que es otra manera de prevenir la neumonía.
Encendido. Cambiar de posición, mientras que en la cama de recuperación estimulan la circulación y la respiración profunda y alivian las áreas de presión.
Ejercicios de pies y piernas. Mover las piernas y los pies estimula la circulación. Dependiendo del tipo de cirugía, se recomienda a los pacientes que doblar la rodilla y levantar el pie varias veces, a "pedalear" y trazar círculos con sus dedos gordos del pie. Se le puede pedir que use medias elásticas especiales para estimular la circulación.
¿Qué es la terapia intensiva?
A veces, un paciente es trasladado a la unidad de cuidados intensivos (UCI) para monitorizarlo más de cerca. El cuidado intensivo es necesario más a menudo para pacientes en respiración artificial, para los pacientes que se recuperan de ataques al corazón o una cirugía mayor, para pacientes en shock y para pacientes con insuficiencia renal aguda, entre otras razones. En cuidados intensivos, el personal clínico observa de cerca al paciente las 24 horas del día.