La diabetes puede tener un impacto en todo el cuerpo. Su cerebro no es la excepción. Estudios recientes han relacionado el tipo 2 diabetes a una desaceleración en el funcionamiento mental y un mayor riesgo de la enfermedad de Alzheimer. La posibilidad de complicaciones cerebrales es una razón más para mantener sus diabetes bajo control.
Diabetes en el cerebro
Los científicos aún no están seguros exactamente cómo la diabetes tipo 2 podría afectar el cerebro. Sin embargo, varios factores están probablemente involucrados.
"Alto nivel de azúcar en la sangre puede afectar directamente a cualquiera de las células nerviosas o células de apoyo en el sistema nervioso", dice Alan Jacobson, MD, profesor emérito de psiquiatría en la Facultad de Medicina de Harvard. "También puede conducir a daños en grandes y pequeños vasos sanguíneos." Esto, a su vez, reduce la cantidad de oxígeno que llega al cerebro. Además, aumenta el riesgo de tener un derrame cerebral, que puede matar a las células del cerebro.
Además, la diabetes tipo 2 por lo general comienza con resistencia a la insulina, en la que la grasa, el músculo y el hígado las células no pueden utilizar la insulina de manera eficaz. Al principio, el páncreas responde bombeando más insulina. La misma enzima que descompone la insulina también se rompe una proteína llamada beta-amiloide, que se acumula de forma anormal en el cerebro de personas con enfermedad de Alzheimer. Con gran parte de la enzima en el trabajo romper la insulina, la beta-amiloide podría tener más posibilidades de acumular.
Efecto sobre el procesamiento mental
La investigación ha vinculado la diabetes tipo 2 a una disminución de la función mental. Un estudio observó que la capacidad mental fueron los más afectados en los adultos de mediana edad y mayores con diabetes. Los resultados apuntan a la velocidad neurocognitivo y el funcionamiento ejecutivo. "Estos se cree que son los principales componentes de la salud cognitiva", dice el investigador Roger Dixon, Ph.D., profesor de psicología en la Universidad de Alberta.
Velocidad neurocognitiva se refiere a la rapidez y la precisión con la que responde a las situaciones. Es un medidor útil de la salud general del cerebro. La función ejecutiva se refiere a la planificación, el control y la vigilancia de sus propias actividades mentales. "Es crucial para el éxito en la vida cotidiana", dice el Dr. Dixon.
La buena noticia es que los déficits observados en este estudio fueron leves. Y es posible que puedan ser prevenibles. Dr. Dixon dice: "Mediante el control de la diabetes con medicamentos y cambios de estilo de vida, las personas pueden ser capaces de controlar o limitar sus efectos sobre la salud de su cerebro."
Mayor riesgo para la enfermedad de alzheimer
Otras investigaciones han vinculado la diabetes tipo 2 con la enfermedad de Alzheimer. Un estudio de gemelos suecos encontró un mayor riesgo de enfermedad de Alzheimer más tarde en la vida entre las personas que tenían diabetes en la edad madura. El efecto no fue tan fuerte en los que recibieron la diabetes después de los 65 años de edad. "Parece que mientras más tiempo tenga diabetes, mayor es el riesgo de Alzheimer", dice la investigadora Margaret Gatz, Ph.D., profesor de psicología en la Universidad del Sur de California.
Los estudios han encontrado una relación similar entre la presión arterial alta de la mediana edad o la obesidad y más tarde la enfermedad de Alzheimer. Con la presión arterial, por lo menos, "controlar el riesgo que trae de vuelta", dice el Dr. Gatz. La implicación: Llegar sanos no sólo le beneficia en la actualidad. También puede ayudar a proteger el cerebro durante décadas en el futuro.