Los ejercicios de Kegel no requieren ropa o equipo especial. Son fáciles de aprender y fácil de hacer. Y si las hacen bien, nadie puede decir que estás haciendo ellos, así que se puede hacer casi cualquier lugar. Su médico, enfermera o fisioterapeuta pueden responder a cualquier pregunta que usted tenga y ayudarle a empezar.
Un suelo pélvico débil
Los músculos del suelo pélvico pueden debilitarse con la edad, el embarazo y el parto vaginal, lesiones, cirugía, tos crónica, o la falta de ejercicio. Si el piso pélvico es débil, la vejiga y otros órganos pélvicos pueden bajar fuera de lugar. La uretra también puede abrir fácilmente y permitir que la orina se escape. Los ejercicios de Kegel pueden ayudar a fortalecer los músculos del suelo pélvico para que puedan apoyar mejor a los órganos pélvicos y controlar el flujo de orina.
¿Cómo se hacen los ejercicios de Kegel
Intente cada uno de los ejercicios de Kegel que se describen a continuación. Cuando estás haciendo ellos, trate de no mover la pierna, glúteos o los músculos del estómago.
Mientras orina, intente detener el flujo de orina. Iniciar y detener tan a menudo como puedas.
Contrato como si estuviera deteniendo el flujo de orina, pero lo hace cuando no esté orinando.
Apriete el recto como si estuviera tratando de no pasar gas. Contraiga el ano, pero no mueva las nalgas.
Consejos útiles
Haga sus ejercicios de Kegel tan a menudo como puedas. Cuanto más usted los hace, más rápido se sentirá los resultados.
Escoja una actividad que a menudo hace como un recordatorio. Por ejemplo, hacer los ejercicios cada vez que se siente.
Apriete el suelo pélvico antes de estornudar, levantarse de una silla, tos, risa, o ascensor. Esto protege su suelo de la pelvis de una lesión y puede ayudar a prevenir la pérdida de orina.
Trate de mantener cada contracción contando lentamente hasta cinco. Usted probablemente no será capaz de mantenerlos durante todo ese tiempo al principio, pero sigue practicando. Será más fácil como el suelo pélvico se hace más fuerte. Con el tiempo, los pesos especiales que se colocan en la vagina pueden ser recomendados para ayudar a que los ejercicios sean aun más eficaz.